lunes, 30 de abril de 2012

My brother…  my hate…  my love?

Parejas: Maky x Hiroki

CAPITULO 1

Ese día mis padres me tomaron por sorpresa, de la noche a la mañana me anunciaron que debían irse del país por trabajo por tiempo indefinido y yo no podría acompañarlos para no perder clases, pero esa no fue la peor noticia, lo peor de todo fue que dijeron que debería quedarme a vivir por un tiempo con mi hermanastro al cual odio con toda el alma. Había logrado aceptar que mi madre volviera a casarse pero que tuviera que llamar de hermano a aquel chico que me crispaba los nervios con solo pronunciar una palabra… eso sí que me irritaba, pero la decisión ya estaba tomada así que ese mismo día tuve que empacar e ir a su casa.

Ni bien llegue mi madre ya arranco el auto para irse directamente al aeropuerto dejándome en la puerta de su casa. La mire detenidamente un momento para luego dar un amplio suspiro y tocar el timbre, en verdad era una casa enorme, era increíble que el teniendo apenas 25 años tuviera una casa tan lujosa, cosa que no entendía. Toque el timbre una y otra vez pero nadie atendía lo cual comenzaba a irritarme puesto que lo habían llamado con anticipación y había dicho que estaría en casa esperándome pero aparentemente no era así. Continúe golpeando y tocando timbre hasta que luego de 23 minutos de insistir finalmente se  abrió la puerta. Al verlo note que solo vestía unos bóxers y una camisa desabotonada lo cual me hiso sonrojar pero inmediatamente mire hacia otra parte diciéndole extremadamente molesto

-¡Ya hace más de 23 minutos que golpeo a la puerta y no atendías, ¿qué demonios hacías?!

-¿Ah?- dijo rascándose la cabeza y pensando con una cara de sueño –pues estaba durmiendo, eres muy inoportuno.

-¿¡Que!?- le dije más que molesto –te llamaron hace una hora diciendo que llegaría a la hora marcada que fue hace 23 minutos exactos.

-¿Enserio? ¿23 minutos exactos? dijo el comenzando a reír de forma burlona cosa que solo aumentaba mi furia –si que eres un cerebrito, controlas demasiado el tiempo… deberías relajarte y no hacer las cosas puntualmente siempre.

-Y tú deberías tomarte más enserio las cosas, eres demasiado irresponsable no puedo creer como haces para tener tanto éxito siendo tan inmensamente irresponsable.

-Es vergonzoso que mi hermanito de 15 años me este dando lecciones de responsabilidad- dice ya entrando a la casa dejando la puerta abierta para que entrara.

-Ni se te ocurra llamarme hermano, el que tu padre se halla casado con mi madre no quiere decir que te considere o te vaya a considerar algún día como un hermano.

El solo me miro y rio nuevamente  volviendo a caminar con la mirada al frente lo cual me hiso enfurecer, su indiferencia e irresponsabilidad me hacían rabiar. Al llegar a las escaleras me hiso la seña de que lo siguiera, llegamos  al piso de arriba y se apoyo en el marco de una de las puertas cruzándose de brazos y luego de bostezar simplemente dijo

-Esta será tu habitación, ahora no me molestes por el resto del día que aun es muy temprano.

Arque una ceja y le digo –pero si son ya las 10 y 45 de la mañana.

-Usualmente duermo hasta tarde así que no veo la diferencia.

Dice para luego caminar hasta la habitación de la puerta contigua y entrar en ella cerrando la puerta tras de sí. No pude decir más así que entre a esa habitación, no estaba nada mal, ya tenía ropa de cama y las mantas y todo estaba muy bien arreglado, había un escritorio y un armario para la ropa, parecía que se había preparado. A pesar de que me habían dicho que estaría un buen tiempo aquí preferí no desempacar, aun estaba reacio a la idea de tener que vivir con Hiroki, aunque la verdad no sabía mucho de él, cuando nuestros padres se casaron el ya vivía solo, y solo lo veía durante los cumpleaños, navidades y celebraciones y casi no nos habíamos dirigido la palabra en todo este tiempo, pero por alguna razón siempre lograba irritarme, su forma de hablar tan serena e impecable, su amplio conocimiento (a pesar de que no lo aparentase) y su gran atractivo, todo eso lo convertían en alguien perfecto, o por lo menos era lo que aparentaba frente a todos, aun así esas cosas me hacían enojar ya que jamás podría estar a su altura, por ello desde que lo conocí trate de ser mejor que él, en estos cuatro años de ser hermanastros había intentado superarlo pero sin importar lo que hiciera siempre ganaba, por ello lo detestaba a muerte, pero algún día lograría sacarle esa falsa sonrisa de la cara, esa era mi gran meta.

Deambule por la casa el resto de ese día, no tenia clases ni tarea así que no tenía mucho que hacer, pasaron las horas y el aun dormía, en verdad era perezoso para las mañanas, finalmente tome mi laptop y fui hasta la sala de estar de la habitación de abajo y comencé a chatear con amigos del colegio con los auriculares puestos escuchando música por un buen tiempo. Ni siquiera note cuando Hiroki se levanto y bajo las escaleras, al verme allí dio unos pasos grandes para que lo escuchara venir pero al notar que no lo escuchaba por los auriculares se acerco hasta quedar detrás de mí y ver la laptop para saber que hacía, entonces siento que me abraza y me besa en la mejilla:

-Buenos días Maky.

Salte instintivamente al sentir su abrazo y me voltee más que rápido viéndolo a los ojos para quitarme los auriculares –No me asustes así, y por cierto, serán buenas tardes, ya son las 3 y 34 minutos.

EL se apoya en el respaldo del sofá y dice riendo ligeramente –otra vez controlando la hora, ya te dije que te relajes- dice para luego levantarse e ir a la cocina sirviéndose un café mientras yo lo seguía con la mirada, ¿Cómo podía el ser el distinguido Hiroki Her, primero de su clase en la universidad, un distinguido filosofo y escritor, reconocido por ser una persona brillante a pesar de su corta edad? La verdad parecía más bien un adolescente perezoso y sin cerebro.

Lo vi tomar un emparedado y comérselo con el café para luego subir las escaleras y ducharse, al salir me impresione de tal manera de que lo quede viendo, estaba vestido con un traje azul marino y una camisa blanca sin corbata, en verdad se veía elegante y… atractivo. Al llegar a la sala de estar me dice con una pequeña sonrisa:

-Tengo que salir, no me esperes- para luego salir por esa puerta sin decir nada más.

Pasaron las horas y no me sentía del todo cómodo estando solo en esa gran casa que era incluso más grande que la de mis padres, finalmente pedí comida a domicilio para luego ducharme eh ir a dormir temprano ya que al día siguiente tenia clases temprano. Pero a mitad de la noche escucho un ruido que proviene de la sala de estar, me levanto tomando las mantas y cubriéndome con ellas para mirar por las escaleras hacia la sala de estar, me quede paralizado al ver lo que ocurría, vi a Hiroki besándose de forma apasionada con un hombre en la sala, me quede impactado, jamás hubiera pensado que él tuviera esos gustos. La cosa se volvía caliente, ese hombre ya le había quitado la chaqueta y ahora introducía sus manos por el pantalón de Hiroki mientras que este no dejaba de besarlo, entonces ese hombre me vio y se detuvo mirándome con una mirada fulminante la cual me congelo el alma.

-¿Quién es ese niño Hiroki?- dijo ya separándose un poco sin dejar de verme, a lo que Hiroki se voltea y me mira.

-Descuida, es solo mi hermano-

El aparentemente molesto por mi presencia toma su abrigo antes de que Hiroki pudiera decir nada y solo le dice –cuando no tengas que hacer de niñera me llamas- Hiroki solo lo miro irse como si nada para luego suspirar y dirigirme una mirada que si bien no era de molesto no pude evitar irme corriendo a mi habitación, entre y me recosté cubriéndome hasta la cabeza, ni siquiera me asome al escuchar pasos que venían rumbo a mí, pero pronto sentí como se sentaba en el borde de la cama y deslizaba una mano por mi espalda a lo que reaccione alejándome:

-¡No me toques!- el me mira con una sonrisa la cual me congelo.

-No se lo digas a nuestros padres, ¿de acuerdo?

Lo mire un momento para luego decirle –¿y porque  no quieres decírselos, el que…seas …gay?

-¿Tu se los dirías… que te has besado con un hombre?

-¿Q… que?- lo miro sorprendido para luego decir –claro que no además ese no es mi caso ya que jamás eh besado a uno, así que no podría saberlo… además yo jamás estaría con uno me resulta asqueroso.

El me sonríe de forma indescifrable para luego cuando se movía creí que seria para marcharse pero al mirar al frente siento sus labios en los míos acariciando mi mejilla con su mano, más que rápido lo empuje para que se separara de mi -¿¡Qué demonios crees que haces!?- el solo me sonríe de la misma forma, yo entre sonrojado y molesto me levanto y lo comienzo a empujar fuera de mi habitación él no se resiste mucho -¡Sal de mi habitación!

-Técnicamente toda la casa es mía así que esta también sería mi habitación- yo aun más molesto lo hecho para luego escucharlo decir –pues ahora no puedes decirle a nuestros padres lo ocurrido ya que si lo haces yo les diré que nos besamos y que fuiste tú el que lo quiso-

-¡Que!- me molesto aun mas –¡tú fuiste quien me beso a mí!

-Pues era tu palabra contra la mía, si tú dices lo que viste en la sala de estar yo diré que tu también me besaste… no creo que quieras que tu madre se entere, buenas noches amorcito- dice para darse la vuelta y entrar en su habitación.

Cerré la puerta más que rápido apoyándome en ella estaba inmensamente furioso con él, mi corazón estaba acelerado al igual que mi respiración, no podía creer lo que había ocurrido, lleve mis dedos a mis labios para rozarlos ligeramente, ¿en verdad Hiroki me había besado?, hubiera creído que el recibir un beso de un hombre seria asqueroso pero… no fue así… ahora debía decidir si contárselo a mis padres o no… no sabía qué hacer, debía pensarlo ay que lo último que quería era que mi madre se enterara de algo así…. ¿qué haré? ¡Como lo odio!

Continuara…